Soy consciente que lo que hoy me dispongo a escribir puede levantar ampollas en algunas personas e incluso puede que alguien se de por aludido. Nada mas lejos de mi que la intencion de ofender a alguien, sobre todo cuando es inevitable algunas veces generalizar por mucho que se intente no hacerlo, pero hay ciertos temas en los que quiza llevados por un cierto cabreo caemos en ello. Por lo tanto si ofendo a alguien le pido anticipadamente disculpas porque evidentemente todos no somos iguales y hago una vez mas mio el dicho de que de todo hay en esta viña del Señor en la que nos movemos a diario.

   Los teleoperadores que todos hemos sufrido alguna vez, esas personas desconocidas totalmente que cuando nos contestan al telefono porque les llamamos para resolver dudas, pedir soluciones a un problema, solicitar informacion o cualquier otro requerimiento; esperamos de ellas al menos un minimo de educacion, ya se sabe un ¡Buenos dias, tardes o noches!, no un seco ¿Que desea? como me ha pasado a mi hoy y que cuando les saludes no contesten al mismo y te urgen que vayas al tema. Son dados, quiza por norma de la empresa, a solicitarte toda clase de datos personales, nombre, DNI, telefono y demas. Pero ellos en cambio la mayoria de las veces no te dicen ni su nombre ni su numero de empleado, algo que me parece totalmente injusto y que te deja en inferioridad de condiciones, puesto que si ellos necesitan la certeza de saber con quien hablas a mi me pasa lo mismo y quiero saber a quien le estoy dando mis datos personales. Este es el comienzo, pero luego viene lo que suele ser mas grave en muchas ocasiones y es que quien te tiene que resolver el problema la mayoria de las veces no es un español nativo -que conste que esto no es racismo-, pero no entienden la mayoria de las veces nuestras expresiones coloquiales y te ves en la obligacion de darles explicaciones que se da por supuesto que deberian entender. No digamos ya si tienes la osadia de decirles que quieres hablar con alguien nacido en esta España, porque se ofenden, te cortan la comunicacion o te ponen una musica interminable de la que terminas cansandote y cuelgas. Vuelves a intentarlo con la esperanza de que esta vez tengas mas suerte y quien te toque esta vez te entienda, pero muchas veces es inutil. Asi que resignado decides tener paciencia con la esperanza de que esta vez te puedan dar la solucion que buscas.

   Yo tengo una guerra particular con los de la compañia esa de telefonia naranja, es superior a mis fuerzas porque he llegado, aprovechando que la llamada es gratuita, a estar media hora escuchando musica por el manos libres y cuando ya me sabia la cancion de memoria, con sus notas musicales incluidas o me han colgado o al contestarme otra vez el mismo, cabreado le he puesto yo musica. Es una guerra psicologica que termine ganando cuando consegui por fin hablar con alguien que entendio mi problema y le puso solucion. Pero me costo varias llamadas. Por supuesto tambien estan los que te despiertan cuando estas en lo mejor para venderte la oferta del siglo y acabas apagando el movil y sigues durmiendo acordandote de toda su familia. En fin el tema da casi para una tesis doctoral, asi que termino aqui y dejo esta pequeña reflexion de un tema que no deja de ser sorprendente. Las compañias deberian mejorar esto porque esta en juego su imagen. Por cierto, los de la compañia Movistar son amabilisimos ultimamente, asi que de todo hay.

000