En un año como este 2015, en el que son varias las convocatorias electorales previstas, tendremos oportunidad de ver hasta que punto los transportistas de este país le importamos a los políticos. Será el momento de saber si en realidad son capaces de hacer suyas nuestras demandas o si, como siempre, tan solo les importan nuestros votos para olvidarse después de nuestra existencia.

Los partidos políticos mas importantes del país no se han preocupado por acercarse, tan siquiera, a cualquiera de las asociaciones o plataformas que luchan por la defensa del transporte de base. Algo que tampoco debería sorprendernos, sobre todo si tenemos en cuenta, que al igual que el resto de la sociedad, también ellos permanecen ajenos a los problemas que padece el transporte de base en este país.

Ni tan siquiera han levantado la voz ante el anuncio del Ministerio de Fomento de imponer la circulación de los camiones por las autopistas que transcurran paralelas a una carretera nacional. Tal vez la culpa también sea nuestra por no haber sido capaces de hacernos oír por los partidos políticos. Pero ellos parecen estar en otro mundo, más preocupados por las cuestiones políticas de alto nivel, dejando a un lado los problemas del transporte, sencillamente porque no estamos organizados como un colectivo al que se debería tener en cuenta.

Tampoco nuevas formaciones como Podemos han mostrado el más mínimo interés por el transporte. Ese proyecto que aparece en las redes sociales como «Podemos Transporte» no ha tenido el calado suficiente en el sector. Puede que sea como consecuencia de nuestra más que ganada desconfianza hacia todo aquello que suene a partido político. El intento por parte de algunos compañeros de crear un círculo dentro de esta formación que tuviera en cuenta nuestra profesión, no ha tenido el apoyo que se merecía por parte de Podemos, desilusionando a los que intentan luchar de alguna forma por la dignidad del sector.

Así pues, de cara a este año electoral, no debemos dejarnos llevar por los cantos de sirena de los partidos políticos que tan solo buscan nuestro voto. Tenemos que conseguir que seamos valorados y defendidos tal y como nos merecemos en justicia. Luchando por la dignidad del transporte sin ser utilizados con fines electorales por ningún partido político. Ese, y no otro, tiene que ser nuestro objetivo si queremos conseguir la justicia que el transporte se merece para dejar de ser un sector olvidado, tanto por los políticos, como por la sociedad. ¡¡¡BUENA RUTA!!!.

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