Cuando uno observa la situación actual del transporte en España los continuos ataques que esta sufriendo desde los diversos sectores que pretenden influir sobre el gobierno para imponer sus intereses, uno no deja de preguntarse ¿Que mas tiene que ocurrir para que el transporte de base despierte de una vez? ¿Cuantos ataques mas tiene que sufrir? y ¿Hasta que punto estamos dispuestos a aguantar?.Evidentemente la paciencia parece ilimitada. La imposición de que los camiones tengan que circular, si o si, por las autopistas escudándose en la seguridad vial, para en realidad utilizarlos para que sean los transportistas los que rescaten a las empresas concesionarias de la explotación de las autopistas. La aparición de los megacamiones en las carreteras, con el único fin de ahorrar transportes a las grandes multinacionales del consumo, para cuya imposición parece que no es tan prioritaria la seguridad vial en este caso, pero que obedece claramente a intereses meramente comerciales de las grandes multinacionales del consumo y de la logística.

El engaño que supuso para el sector aquella convocatoria de huelga del pasado 17 de noviembre con la excusa de la devolución del céntimo sanitario y que no se aprovecho como debería para hacer una huelga en la que se plantearan todos y cada uno de los problemas del transporte en España. El total pasotismo del gobierno español ante problemas tan graves como los causantes por el cabotaje desmedido y el dumping social.

La desaparición del sistema de módulos que llevara al abandono de la profesión a muchísimos autónomos. La imposición de los 3 camiones para quien quiera acceder a la profesión, algo totalmente injusto y discriminatorio frente al acceso a la profesión de otros sectores. Las continuas ilegalidades cometidas contra los conductores asalariados imponiendoles la comisión de delitos como modo de presión para trabajar, sin una legislación clara que delimite las responsabilidades penales.

En fin, todas y cada una de las injusticias que estamos sufriendo a diario y contra las que no hacemos nada, es mas, damos la sensación de que las asumimos. Así pues ¿Cuantas injusticias tiene que seguir soportando el transporte para despertar de una vez?  ¡¡¡BUENA RUTA!!!.

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