En este trabajo cuando no queda mas remedio que ir a cargar o descargar a muchas empresas, la gran mayoría, pero sobre todo a las grandes cadenas de distribución, almacenes y plataformas logística, a primera vista, sobre todo quien acude por primera vez, le da la sensación de entrar en un cárcel.Todo vallado, con guardas de seguridad en sus garitas, en algunos casos armados, pertrechados en ellas, protegidos, incluso con cristales blindados y una pequeña ventanilla, que muchas veces ni abren, las conozco con micrófonos y altavoz incluidos, mas protegidas que muchas entradas a mas de un Ministerio. Tienes que entregar tu D.N.I. incluso -ya escribí una vez que en España deberíamos nacer con el en la frente-. Luego das el siguiente paso con el camión, nueva entrega de datos, que si, que me acaba de pasar esta mañana con firma incluida y rellenado de lista, nombre, apellidos y demás, como si no hubiera información entre el primer sitio y el segundo y los ordenadores estuvieran desconectados, o se colara otro con tu nombre. Después vendrá el resto.

Carteles de prohibido por todas partes, vamos que si los memorizas parecen un tomo del Espasa, así que o pasas de ellos, a fuerza de ir te los aprendes, o llegas a la conclusión que el próximo que te encuentres sera: «¡¡PROHIBIDO RESPIRAR!!! QUIEN LO INCUMPLA SERA EXPULSADO DE LAS INSTALACIONES»,  que si que no exagero, que el de esta mañana, aquí en Cantabria en la carretera N 634 que enlaza la A-8 con Torrelavega, concesionario de una gran cadena que traducida al castellano es cruce de caminos, mas datos no que sino esta tarde no entro a recoger papeles. Pero sin nombres que estos se querellan hasta por estornudar cuando todos están en silencio. Bueno sigo.

Vamos que no puedes ni tan siquiera hacer tus necesidades, que si te de un apretón y tienes que recorrer a pie los dos kilómetros hasta la garita del guardia cuando llegues eres un ambientador aéreo. Y todo así. Mientras nosotros callamos y consentimos, porque como ya somos unos mandados, firmamos hojas de seguridad que si te entretienes en leerlas dices, ¡Pero si todo esto es lo mismo repetido y muy poco va conmigo! Que se cuidan muy bien de no infringir leyes escritas. Salvo que tienes que cumplir sus ordenes en muchos casos: «Descarga, carga, ponlo  como yo te diga, cuadrame bien la fila que hoy no atino con la maquina, y cuando salgas no olvides hacer la ola».

Sencillamente, fuera de cachondeo, porque quienes  se tienen que imponer no lo hacen, esos que ayer se reunían con una ministra que dicen que hay en Fomento, que es quien en realidad, haciendo honor a eso de «popular», que viene de pueblo, o sea nosotros, debería preocuparse por los de a pie, esos con los que se les llenara la boca millones de veces este año, pero tan solo para que acudan cual borregitos amaestrados a darles su voto para que luego hagan con el lo que les de la gana, que ya esta uno harto de repetir siglas y nombres. ¡¡YA ESTA BIEN, QUE NO VAMOS A ESPABILAR NUNCA!!  y a este paso acabaremos haciéndoles los pedidos, los repartos, colocandolo en las estanterías y haciendo caja, Pero pobre del que no le cuadre la misma encima, que lo pagara de su bolsillo como todo lo que a ellos les de la real gana, protegidos por esos otros a quien ellos antes votaron.

En fin que me caliento y luego no concilio el sueño a la primera, como es mi costumbre y ya va siendo hora de dormir por hoy digo yo, que el día ha sido muy largo, encima por problemas ajenos a mi que, para colmo casi he tendido que justificar con notario por llegar tarde. Menos mal que cuando me pongo muy serio, me sale una vena que hay quien dice que parezco un guardia civil, ya lo que me faltaba. Como siempre ¡¡¡BUENA RUTA!!!.

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