Esta tarde coincidi con un excompañero que estaba muy ilusionado, resulta que le entregaba su jefe mañana un camion nuevo, nervioso y sin dejar de hacer preguntas, al mismo tiempo que alabanzas por la maquina con la que seguiria trabajando. Se quedo contrariado cuando yo le confese que, mira tu por donde, este que escribe no quiere un camion nuevo, prefiero seguir con este que ya ronda el millon de kilometros, principalmente porque soy consciente de que mi jefe ya lo tendra pagado. Pero,  sobre todo, por haber vivido esa experiencia varias veces y simpre me han llevado a la conclusion de que quien tiene que currar mas de lo normal es el conductor asalariado.

De su sudor no solo tiene que salir para pagar todos los gastos fijos que conlleva un camion en la carretera, ademas de esto, tiene que dejar para pagar el camion nuevo y, por supuesto, dejar beneficios, de lo contrario mal negocio. Todo esto, sumado a cada una de las dificultades por las que atraviesa el transporte en España, convierte el estreno en una tarea muchisimo mas complicada, ¿O no?.

Que si, que no hay quien me convenza de lo contrario, que todo tiene que salir del sudor y del sacrificio del conductor, porque cuando un empresario se ve obligado a renovar la flota lo primero en lo que piensa es en amortizar la nueva inversion. Ya se encargara el, por la cuenta que le tiene, de buscarse la vida para que el camion nuevo ruede la mayor cantidad de kilometros posibles, pero quien lo tiene que soportar sobre sus espaldas, va a ser sobre las del ilusionado que se siente al volante, mas feliz que un niño con 100 kilos de caramelos y libertar total para comerselos cuando quiera.

Yo tambien cai en su dia en esa misma trampa, que nadie nacio enseñado y yo menos que nadie, pero mientras disfrutaba de los avances del nuevo camion me dejaba menos horas de descanso, mas dias en la carretera y cuando me di cuenta ya era tarde. Asi que no quedaba mas remedio que esperar a que pasaran los años con la esperanza de no volver a caer de nuevo en el mismo error.

Despues he visto a compañeros lamer el culo y arrastrarse para que les dieran un camion a estrenar. Les he observado como se sentian superiores al resto, sintiendose mejores conductores que los demas, como si de la noche a la mañana se hubieran convertido en los empleados de mayor confianza de la empresa, mirando por encima del hombro subidos en una cabina en la que sobraba soberbia y quedaba poco espacio para la humildad.

Por supuesto  que estoy de acuerrdo en que se renueven las flotas, tampoco es justo ir arrastrando chatarra, pero siempre que se haga con total normalidad y sin sacar del sudor del conductor todo lo dicho anteriormente. Tambien soy consciente que en casos como el mio sale de los beneficios que deja este camion para pagar del nuevo, pero tampoco creo que sea en la misma proporcion que el compañero que estrena maquina. Al igual que acepto que despues de escribir esto recibire criticas, pero que le voy a hacer, es mi humilde opinion. ¡¡¡BUENA RUTA!!!.

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