Harto de estar harto de esperar aqui en Murcia desde ayer a las 6 de la tarde y con la esperanza y los dedos cruzados para poder cargar hoy a las 9 de la noche. Todo por culpa aun no se muy bien de quien. o tal vez si. Por «Pepis» y «Manolitos» que se pasan la pelota de unos a otros porque alguien tiro mis datos a la basura, los puso en el fondo de la bandeja o simplemente le dio la carga a algun amigo suyo mientras en mis mismas narices otro se lleva la carga que tendria que haber sido mia, una cuestion de simple recismo visceral. Por aqui todos los que llevamos un camion vasco o navarro no somos mas que terroristas y te pasan por encima olvidandose de los minimos que requieren la educacion y la buenas formas, te quedas con un cabreo del quince y maldiceses en vano, encima tienes que soportar que te pongan buena cara, te den buenas palabras y cuando se dan media vuelta la puñalada trapera. Una vez mas entra en funcionamiento la mafia y todos tienen un amigo, un conocido, o simplemente un «primero los de aqui y ese que se joda». Se devuelven favores y cenas, juergas y menesteres. Puede parecer duro pero es la realidad. Quien tiene que organizarlo todo, dar ordenes de carga y horarios se pierde cuando empiezan los problemas, no contesta al telefono o se pasan la culpa de uno a otro mientras corre el reloj, aumenta el cabreo y cada minuto eres mas consciente de que te la han metido doblada y ni tu jefe puede hacer nada. Curiosamente el mismo que hace tres horas se llevo mi carga es muy posible que dentro de unos dias me lo encuentre perdido por tierras vascas o navarras, cambiara la cara y haciendo como que no me conoce se le llenara la boca llamandote «compañero» para que le indique una direccion. El cuerpo pide darle instrucciones equivocadas y que se pase dos dias dando vueltas, ignorarle y devolverle la jugada. Pero eso seria ponerse a su nivel, ser como el y eso nunca, que jodido y todo uno es un caballero y para demostrarle que eres mejor que el le recuerdas la putada anterior y le indicas bien y si hace falta le haces un plano.
Afortunadamente aun quedan caballeros en la ruta, de esos como decimos nosotros «de antes» y cuando estas en un apuro como yo ayer aparecen un belga y un valenciano y sobran manos para sacarte del apuro, que no es mucho, un simple problema tecnico que se puede solucionar sin necesidad de llamar a la asistencia. Despues se aparca juntos y volvemos a la camaraderia, las aventuras, las risas, disfrutando del viento fresco de la noche haciendo los esfuerzos que sean necesarios para que el belga que se defiende en español entienda nuestro particular sentido del humor. No quieres que la noche pase, estas disfrutando de conversaciones risas y una cerveza. Luego a dormir y a medida que van marchando y te quedas solo te das cuenta de que alla se van dos amigos que aunque pasen años y no vuelvas a ver estaran en la carretera con la esperanza de que la proxima vez que nos encontremos no haya ninguna averia tecnica, ni prisas y podamos disfrutar de otra cerveza, risas y conversaciones que haga olvidar estos malos momentos.