Este gobierno que nos ha tocado en suerte y que no nos queda mas remedio que aceptar por eso de seguir el juego democratico, no deja de sorprender cada dia. Cuando Mariano Rajoy decidio nombrar a sus ministros la verdad es que estuvo muy acertado para dar con las personas adecuadas para llevar adelante no solo ya sus famosas reformas, sino para tener en su equipo a los miembros del partido adecuados para aplicar una politica conservadora que en algunos casos roza casi la extrema derecha.

     Alberto Ruiz Gallardon es un claro ejemplo, No deja de sorprenderme esta persona, yo que antes de la llegada de los populares al poder le tenia por ser el mas progreista del PP, se ha convenertido ahora en defensor de las posturas mas conservadoras, dando un giro total a la imagen que proyectaba cuando estaba en la oposicion. Comenzo por subir las tasas judiciales para convertir la justicia en algo a lo que tan solo tuvieran acceso los ricos. Afortunadamente tuvo que dar marcha atras cuando tuvo enfrente a toda la carrera judicial y a la Defensora del Pueblo. 

   Ahora parece estar centrado en reformar la a ley del aborto para satisfacer al sector mas conservador de La Iglesia encabezado por el cardenar Rouco Varela. Ante lo que concuentagotas se va conociendo de cuales van a ser sus intenciones al reformar la ley uno no deja de preguntarse ¿Con que derecho se cree un ministro para decidir en una cuestion tan personal que solo deben tomar las mujeres?. No creo que sea una decision facil para una mujer el decidir abortar y si lo hace creo que es algo que tendra en su conciencia toda la vida. Ahora otra pregunta ¿Que es mejor abortar o traer a mundo a una persona con graves deformaciones y enfermedades con las que tendra que vivir toda la vida teniendo a su familia permanentemente pendiente de su cuidado?. No creo que sea una decision facil, pero me parece que en todo caso es algo que ella y tan solo ella debe decidir.

   Por lo tanto legislar sobre un tema tan delicado es algo que no debe tomarse a la ligera tan solo para satisfacer a una Iglesia mas preocupada por la politica que por llevar a la practica la doctrina de Jesus. Para rematar la faena salta al ruedo el ministro de interior para comparar nada menos que con los terroristas  a las mujeres que abortan. Una salida mas de tono de otro personaje que roza la extrema derecha. En el PP se comienzan a oir voces discrepantes con el ministro de justicia. Espero que estas triunfen y que el señor Gallardon se olvide de la reforma y se dedica a modernizar y agilizar la justicia que hace mas falta. ¿O no?.

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