Resulta cuando menos sorprendente la capacidad que tiene el Ministro de Ëducacion, Cultura y Deporte Jose Ignacio Wert para permanecer impasible en su puesto contra viento y marea y -esto es lo mas chochante- en contra de todos. Nunca nadie hasta ahora en la historia de la democracia española en los ultimos 37 años habia conseguido poner de acuerdo a todos los sectores a los que afecta un ministerio para que hicieran una sola voz en contra de su gestion. Pero a el parece que le va la marcha y hasta yo creo que le pone ver que todos tienen palabras de reproche hacia su persona en cualquier acto publico al que acude y que ya se van haciendo incontables. Tres cuartos de lo mismo le sucede cuando tiene frente a el a los estudiantes.
Por mucho que sea objeto de sus iras y sigan siendo sonadas las protestas y el rechazo que produce su persona, el continua impasible con esa sonrisa entre quien da la sensacion de que se considera superior al resto y quien trata de capear el temporal que le esta cayendo lo mejor que puede, aunque pueda dar la sensacion de estar deseando que se habra el suelo bajo sus pies y pueda desaparecer de aquel abucheo general.
Ha sacado adelante la reforma educativa -una mas- en contra de todos los afectados, apliclando la politica de recortes que le dicto su jefe Mariano Rajoy sin temblarle el pulso lo mas minimo, nada menos que 3.600 millones del ala en tan solo 20 meses que lleva en el ministerio y se ha quedado mas ancho que largo -como suele decirse-. Le ha pegado un recorte descomunal a las becas para los estudiantes y se la ha traido floja las manifestaciones en las calles, como mucho se ha limitado a calificarlas de «politicas». Como si toda su labor hasta ahora al frente de la cartera de educacion fuera una buena obra «mariana» y no estuviera cargada de una clarisima intencion politica muy bien definida. Armo un revuelo considerable cuando decidio subir la nota media que deberian tener aquellos estudiantes que quisieran aspirar a una de las cotizadisimas becas que concede su ministerio. Dio muestras de ser muy tozudo y tan solo cedio en medio punto y con condiciones.
Se enfrenta a un referndum popular sobre su gestion que comienza hoy hasta el proximo 13 de octubre y se da por seguro que conseguira un suspenso mayoritario a su gestion y a su reforma. Ademas le espera una huelga general el 24 del proximo mes. Hoy deberia de haber dimitido o al menos demostrar un minimo de veguenza publica cuando se ha tenido que suspender la apertura del curso universitario en Zaragoza, al que tambien estaba previsto la asistencia del pincipe Felipe. Pero el sigue impasible, en contra de todos y fiel a los dictados de la Iglesia y del sector mas radical de su partido. Todo un ejemplo de lo que no debe ser un ministro en una democracia.