Continúan los abusos contra los trabajadores del transporte, algo que no es nuevo, pero que va en aumento cada dia. Compañeros a los que se les putea continuamente con el objetivo de que terminen por perder los papeles y acaben haciendo algo que provoque el despido procedente. Conductores a los que se tiene meses sin ir a sus casas, por mucho que la empresa cuente con bases y clientes cerca de sus domicilios. Impagos de nominas y salarios con el único propósito de que terminen marchándose de la empresa. En fin, una situacion que llevamos arrastrando demasiado tiempo.
Ante estos abusos por parte de las empresas, la falta de acción de las autoridades, inspectores y sindicatos; tan solo nos queda una salida, denunciar por nuestra cuenta de manera individual. Cuando la denuncia de estas injusticias debería ser colectiva. Tendríamos que contar con el apoyo de aquellos que tienen que velar por nuestros derechos. En lugar de encontrarnos muchas veces con la incomprensión y la falta de solidaridad, incluso, de nuestros propios compañeros. No es de recibo que tengamos que soportar estos abusos simplemente porque nos tengamos que ver obligados a tener que soportar a veces abusos por el simple hecho de tener que sobrevivir.
Da mucha rabia ver situaciones lamentables. Como también me produce indignación cuando esos compañeros hacen publica su situacion en las redes sociales, y en lugar de encontrar el apoyo masivo por parte de los propios compañeros, vemos como se les demoniza, se les critica en muchos casos, e incluso se le aconseja cometer actos de vandalismo contra los vehiculos en actitudes cobardes. Cuando debería ser todo lo contrario. Tendrían que solidarizarse con ellos, apoyarles y hacer masivo el conocimiento publico de estas situaciones, para concienciar de una vez a la sociedad de todas las injusticias que nos vemos obligados a soportar, cuando no somos mas que simples trabajadores y merecemos todo el respeto del mundo.
No vale mirar para otro lado y demostrar indiferencia cuando no nos tocan a nosotros directamente esos abusos. Sencillamente porque tal vez acabemos teniendo que sufrirlos. Debemos ser solidarios, luchar contra los abusos de empresarios sin escrúpulos y concienciarnos de que en realidad es problema de todos. Desgraciadamente vivimos en una sociedad demasiado egoísta. El transporte se ha convertido en una selva en la que cada uno luchamos por nuestra propia supervivencia. Nos estamos convirtiendo en esclavos de nuestras propias circunstancias. Vivimos como nómadas sin patria. Tirados por esas carreteras semanas y meses, sin ver a nuestras familias. Soportando abusos en lo laboral, en lo económico y en lo personal.
Pero no parece que terminemos de despertar de una vez, de concienciarnos y luchar por lo que en justicia nos corresponde. Tener que denunciar de forma individual es una solucion momentanea, pero lamentable que tenga que ser así, sin contar con el apoyo de todo el colectivo. No podemos seguir siendo simples números en una cuenta de resultados y tener menos valor para las empresas que cualquier pieza del camión. Somos personas y merecemos un trato digno y ser valorados como nos merecemos. ¡¡¡BUENA RUTA!!!.
Se comenta en los foros del empresariado del transporte «hay mucho fijo aburguesado que tiene que pasar a las colas de cáritas para que cuando regrese al transporte venga mas dócil y humilde»
Exactamente es que me pasa a mi