Desde que escuche el viernes las declaraciones de la vicepresidenta del gobierno Soraya Saez de Santamaria en la rueda de prensa posteior al consejo de ministros estoy sufriendo un permanente ataque de risa que no se cuando se me pasara porque ya me duele la tripa de tanto reirme. Es mas, esta vispera de San Juan no escribi porque me pase todo el dia y parte de la noche -inocente de mi-, recorriendo todas y cada una de las hogueras que habia en Pamplona y sus alrededores esperando ver como arrojaban a la misma a algun politico, pero nada, no hubo suerte.
La idea que tenemos muchos en esto de «sacrificio de los politicos» no es precisamente el que se vayan a rebajar sueldos y dietas en un ochenta por ciento, al contrario se parece mas a la idea de la gillotina de la revolucion francesa con la esperanza de ver rodar la cabeza de algun poolitico o, al menos, que veamos una entrada masiva en las carceles de tanto caradura que se lo esta llevando crudo mientras a los demas nos piden que nos apretemos el cinturon hasta el punto de que las tallas mas demandadas sean ya las menores o que volvamos a sujetarnos los pantalones con cuerdas.
Mire señora Saez de Santamaria, esta tonteria que ha soltado por la boca suena a chiste malo, la reforma de la administracion que pretende su gobierno sera a costa de despedir funcionarios eventuales en lugar de un cese masivo de politicos, cargos de confianza, asesores, asesores de los asesores y demas ralea nombrada a dedo por ustedes los politicos, sean del color que sean, que son los que se estan cargando la confianza de los ciudadanos en la democracia, dejando por a la altura del betun a los que son honrados y que desgraciadamente nunca llegaran a ocupar cargos de relevancia, sencillamente porque el que no entra por el aro y se comporta como los chorizos no hace carrera politica. Ustedes señora vicepresidenta, como mucho se cortan un poco las puntas mientras buscan otros modos de seguir aumentando sus ingresos. Pongase usted primera como ejemplo de estos ultimos. Sigue cobrando dietas por desplazamiento y de alojamiento mientras tiene vivienda en Madrid.
La frasecita queda muy bien de cara a la galeria pero nada mas y tantos miles de millones como pretenden ahorrar deberian de comenzar a hacerse por arriba y en sentido descendente. Solo estoy de acuerdo en una cosa con esa reforma, en que existe mucha burocracia y mucha duplicidad de funciones y tal vez haya funcionarios que no saben que hacer cada dia. Pero comiencen por ustedes, den ejemplo si quiren recuperar la confianza perdida y no sigan tapandose la mierda unos a otros en ese corporativismo que les lleva a pelarse en publico en una representacion teatral que no nos creemos.