Despuesde pasadas mas de 24 horas del tragico accidente de tren cerca de Santiago de Compostela y con el corazon dolido por la terrible tragedia, mandando por adelantado toda mi solidaridad con los familiares de los fallecidos, los mejores deseos de recuperacion para los heridos y consternado como estamos todos los españoles. Esta terrible desgracia ha demostrado una vez mas que en este pais cuando es necesario todos somos una piña, sobran manos para ayudar en lo que sea. Ya no solo los profesionales, bomberos, sanitarios, fuerzas y cuerpos de la Seguridad del Estado, todos y, tambien por supuesto, los ciudadanos, los primeros en prestar su ayuda despues del accidente, la gran cantidad de personas que no han perdido tiempo en presentarse a donar sangre, en fin, todo un pueblo volcado en cuerpo y alma con los mas necesitados en esta desgracia que ojala no se vuelva a repetir nunca jamas.

   Desde Catañuña, desde la distancia, uno no puede evitar emocionarse ante tanta solidaridad y tanta generosidad. Demostrando una vez mas que los españoles sabemos como nadie estar unidos en los peores momentos, dejando a un lado nacionalismos de via estrecha, rencillas y ese punto, a veces cainita, que tenemos en otras ocasiones. Todo un ejemplo del que deberian copiar literalmente nuestros politicos de todas las ideologias y en lugar de practicar esa pseudopolitica circular en la que solo miran para sus intereses particulares y de partido, dar un cambio radical en su forma de actuar y darse de una vez cuenta de que todos los problemas se pueden solucionar unidos por el bien comun como unico objetivo. Sentarse y dialogar todo el tiempo que sea necesario para llegar a un acuerdo definitivo, claro y conjunto que nos lleve a salir de una vez por todas de esta maldita crisis. Creo que es una simple cuestion de voluntad, de buena voluntad.

   No es precisamente el mejor dia para hablar de politica, pero necesitaba soltar esta reflexion anterior. Ahora en el momento del dolor, es el tiempo de las personas, de las buenas personas, de acompañar en el dolor y de animar a las familias a superar este doloroso trance. Tiempo habra para analizar las causas y sacar las conclusiones oportunas para que la terrible tragedia no se vuelva a repetir. Espero que no ocurra como sucedio con el descarrilamiento del metro de Valencia y que en esta ocasion el gobierno aporte toda la claridad y, sobre todo, que no se olvide de las victimas y de sus familias. Que por una vez se hagan las cosas bien, sin errores lamentables.

   No puedo dejar de olvidarme del conductor de ese tren y de lo que estara pasando a estas horas por su cabeza. Yo he sufrido tambien un grave accidente del que sobrevivi y puedo decir que durante muchos dias no apartaba de mi mente los segundos anteriores y como me repetia mentalmente «Si hubiera echo esto o aquello», pero ya no tenia remedio. Afortunadamente en aquella ocasion solo fui yo el herido, pero aun asi fue duro de superar. Por ello no estaria bien criminalizar a una persona. Porque, no olvidemos nunca que somos humanos y, por tanto, imperfectos y cometimos errores todos.

000