HISTORIAS DE LA CARRETERA. 13. RICARDO. (para el, que esta pasando una mala racha)

Como suelo hacer algunos sábados, hoy vuelvo a estas historias de la carretera, si con el numero 13, con mis supersticiones, y también sin ellas, para quien no las tenga. Se trata hoy de un nombre ficticio por expreso deseo del protagonista aun vivo y que por privado me pidió que la escribiera. Mas que nada porque es una historia agridulce, para sonreír, nunca se sabe, y tal vez provoque alguna lagrima. Tengo que aclarar que después de una larga conversación telefónica en la que acordamos como seria, personalmente huyo de algunos tópicos porque hubo quien me acuso en su día de hacer de esta pagina una especie de «sálvame» -en minúsculas-, pero como siempre, allá cada cual y su imaginación libre.

Ricardo tiene actualmente 3 años mas que yo, 58, esposa y dos hij@s, varón y hembra. Quienes le conocemos desde hace años, con su camión 3 ejes, trabajando fijo de toda la vida para una fabrica, propietaria también del vehículo, pero para el «su camión por encima de todo»; nos hemos reído muchas veces a mandíbula batiente cuando se pone a contar chistes en esas pausas que nunca quieres que se acaben, porque el, castellano de pura cepa, es único e irrepetible contando chistes. Hasta el punto de hacerte un monologo de un malisimo chiste del que ya sabes el principio pero jamas el final irrepetible que le dará ese día Ricardo.

Muchísimas veces le hemos dicho que equivoco la profesión, que lo suyo es el humor, le da sopas con honda a los que salen en la tele. Pero Ricardo dice que el nació en un camión y no quiere jubilarse nunca porque para el la carretera lo es todo. Ahora viene la otra parte. Su hijo mayor nació con síndrome de down, el maldito cromosoma 21 que les diferencia del resto, pero que al mismo tiempo les convierte en seres adorables cuando se les conoce de cerca. Ahora tiene su hijo 34 años, ha estudiado lo que ha querido, siempre integrado, con mucho esfuerzo y siempre con el mejor premio para el; acompañar a su padre de vez en cuando. Su hija nació normal dos años después; buena chica, educada, estudiosa y culta. Una mala noche al cruzar en solitario a las 2, 30 de la madrugada un paso de peatones de la capital de la provincia un mal nacido la arrollo con su coche y se piro y  hasta hoy sin mas noticias del criminal. Una fatal caída de espaldas, lesión de cervicales y ahora en silla de ruedas después de interminables días y meses de hospitales, incluidos los mejores. Pero como cuando al fatal destino se le cruzan los plomos y decide cebarse con quien merece la mayor de las felicidades, para rematar la faena a su amada y única mujer que ha habido y habrá en su vida el año pasado le detectaron un cáncer de mama.

Bueno, pues a pesar de que tod@s los que lean esto hayan llegado a este punto imaginando sus penas. Ricardo continua como cuando le conocí hace tanto tiempo que tendría que pararme para hacer la cuenta matemáticamente para ser exacto, con el mejor de los humores, contando chistes. Seguramente habrá quien le tildara a estas alturas de loco. Pues siento decepcionarlo, ¡¡NO Y MIL VECES NO!!!. Para el ese humor que suelta es una especie de escudo contra el mundo, lo otro lo dramático y millones de veces INJUSTO es algo intimo, hasta el punto que muy pocos, los amigos de verdad, conocemos, tan solo alguno como mucho conoce de vista y poco mas a su hijo mayor. Luego a solas en esos momentos en que, como yo digo haciendo mía la frase del gran Sabina: «Ladran los perros del amanecer» y como todo ser humano necesita y necesitamos desahogarnos con un amigo de los verdad es otra historia muy diferente.

Pero Ricardo ahí sigue con su 3 ejes de la fabrica y cuidado con aquel que se le ocurra decir que no es suyo aunque no  lo haya pagado, que ya ha estrenado unos cuantos y su jefe le deja elegir modelo, cabina y extras, algo que pocos podrán decir, pero el siempre ha cumplido con su trabajo y si hubo retrasos soy testigo, y somos mas de uno, que jamas fue por su culpa. Lo que el diga va a misa tanto aquí como en Roma, como suele decirse, porque el siempre ha demostrado que, por encima de todo es un PROFESIONAL. Un abrazo amigo y compañero. da igual el tamaño de las letras, que si, que me pediste que no utilizara las mayúsculas, que me costara una bronca, pero las mereces, esas y hubiera escrito esto en las mas grandes que este teclado me permitiera. Para el resto, como siempre. ¡¡¡BUENA RUTA!!!.

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4 mensajes en “HISTORIAS DE LA CARRETERA. 13. RICARDO. (para el, que esta pasando una mala racha)

  1. Hay que tener una mente muy clara para no derrumbarse ante tal testimonio.admirable «Ricardo».

  2. Éste querido amigo Ricardo es un HEROE y lo pongo en mayúsculas, ama su profesión, su camión, sus amigos y sobre todo a su familia.
    Ánimo amigo Ricardo estamos contigo y eres un ejemplo para muchos de nosotros.
    BUENA RUTA

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