Antes de iniciar una nueva semana un tanto extraña para nosotros los camioneros, en la que volvemos de nuevo a los atascos, las restricciones para camiones, esta curiosa norma que nos obliga a tener que mirar desde la cabina como el resto de los españoles se dirigen a sus vacaciones de Semana Santa, o simplemente, se desplazan con sus automoviles mientras a nosotros no obligan a parar y si no lo hacemos ya sabemos a lo que nos enfrentamos. Denuncias que no te las quita ni Santa Rita, paralizaciones por la tremenda, con bronca incluida, ya no solo por el agente de turno, tambien por parte del jefe que se hace el loco y por mucho que en la empresa tengan desde el dia 1 de enero la informacion correspondiente por parte de la D.G.T. o del Ministerio de Fomento, en la que les informa claramente de las restricciones al trafico pesado superior a 7.500 kilos durante todo el año. Te dicen que no pasa, nada, que intentes seguir, aunque tenga que ser por carreteras comarcales, locales o por medio del monte.
Porque no dejamos de ser los ultimos monos a la hora de machacarnos con leyes, denuncias, presiones y todo lo que haga falta. Pero eso si, si por lo que sea a la patronal de turno le interesa -algo que no ocurre desde hace muchos años-, se convova una huega y el pais queda al borde el caos mas absoluto, desabastecido, con la poblacion en contra nuestra y todo el mundo apuntandonos como si fueramos criminales. Pero sin entender que si no fuera por nuestro trabajo, las horas y horas que le quitamos al sueño, a la familia y a nuestra salud, ellos no tendrian su comida en las estanterias de los supermercados, la ropa en las tiendas, el material en la ferreteria, y asi sucesivamente.
Entonces si, para algunos somos imprescindibles y necesarios. Pero como ya he escrito en otras ocasiones. Este es el unico pais democratico que conozco que no tiene un sindicato mas o menos decente de conductores. No busquen porque no lo hay. No se dejen engañar si les dicen que todos los sindicatos mayoritarios tienen su federacion de transporte. Efectivamente la tienen, pero solo de adorno y para que algunos listos de turno se asignen los cargos correspondientes al ramo, estar disfrutando de una vida comoda como liberados y soltando por la boca la palabreria inutil al respecto para convencer a incautos que se dejan comer el tarro por el primero que ven. Vamos, de ese tipo de personas que si les dicen: «Mira al cielo que pasa un rinoceronte vatiendo las orejas volando y haciendo cabriolas como una avioneta», no pierden una milesima de segundo en mirar.
Pero de defender a los conductores nada de nada, y lo que es aun peor, con los tiempos que corren, el paro, la precariedad laboral, las rebajas de sueldos y que cualquiera obligado por las circunstancias desgraciadamente se ve obligado a aceptar el trabajo y las condiciones economicas que le ofrezcan con tal de poder llevar a su casa un pedazo de pan.
Asi que no queda mas remedio que eso de «Ajo y agua». Que traducido es «A joderse y aguantarse», y sino te contestan lo de siempre. «Si no estas agusto ya sabes lo que tienes que hacer», y se quedan mas anchos que largos esperando a que pidas la cuenta y les des la alegria del año. En fin paciencia.