Hace dos semanas que no escribo en este blog sobre politica, pero hoy no he podido resistirme. La crisis politica que atraviesa el gobierno de Navarra no me deja indiferente. Lo que mas me llama la atencion de todo esto es la habilidad que tienen los politicos para dar la vuelta a la tortilla, echar las culpas al enemigo y no asumir responsabilidades. 

La presidenta del gobierno foral Yolanda Barcina coreada convenientemente desde Madrid por el Partido Pupular como devolucion de los favores que UPN le hace al gobierno central con sus votos es el Congreso tratan de desviar la atencion de la crisis criticando al Partido Socialista de Navarra por la presentacion de la mocion de censura y acusandole por su afan de llegar al gobierno regional apoyandose en los votos de Bildu. Pero sin hablar para nada del verdadero problema de esta crisis y que no es otro que un clarisimo caso de corrupcion en el gobierno regional protagonizado por la consejera de Hacienda Lourdes Goicoechea cuando intento presionar a la exdirectora de Hacienda Idioia Nieves para conseguir de esta informacion sobre las empresas que investigaba la hacienda foral entre las que podrian estar antiguos clientes de la consejera.

Pocos son los que se centran en la gravedad del problema que demuestra un claro caso de ocrrupcion. Tiran balones fuera tratando de desviar la atencion hacia la posiblidad de que el PSN termine negociando con Bildu la formacion del futuro gobierno. Le ha faltado tiempo a los lideres nacionales del PP para saltar a los microfonos criticando que los radicales puedan estar en el futuro gobierno. Pero lo dicho, de entrar en la gravedad del problema nada de nada.

El gobierno regional de Barcina ha nacido debilitado desde las elecciones de 2011, despues de romper de manera brusca su acuerdo con los socialistas en el gobierno regional porque no soportaba que le forzaran continuamente a realizar una politica mas social, se quedo en minoria. A continuacion salto el escandalo de las dietas en Caja Navarra, en las que por cierto, tambien se lo llevaban crudo los socialistas. Por mucho que devolvieran el dinero de aquellas reuniones en las que en tan solo con media hora de diferencia, lo justo para tomarse un cafe, se convocaban nuevas reuniones para  sumar mas dietas. La presidenta navarra quedo muy dañada ante la opinion publica navarra. Ahora se enfrenta ante este caso de corrupcion en el que por mucho que intente desviar la atencion y sembrar la alarma por la posible union conjunta de los partidos de la oposicion, su prestigio ya esta tan dañado que tiene muy pocas posiblidades de ganar unas elecciones autonomicas.

Me llama poderosamente la atencion que se intente ignorar a Bildu y a los otros partidos de izquierda sin tener nunca en cuenta que si estan en las instituciones es porque hubo electores que les votaron. Sin entrar a valorar si son legales o no, estan ahi y los ciudadanos navarros que eligieron se merecen el mismo respeto que al resto. 

Lo triste de todo esto es que se intente deviar la atencion sin entrar en la gravedad del problema que ha provocado esta crisis.

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