Si el Ministerio de Fomento que dirige Ana Pastor continua adelante en su idea de que los camiones que circulen por las carreteras nacionales en España pasen a partir del 1 de Abril a hacerlo por las autopistas que transcurran paralelas a estas vías, debería plantearse muy seriamente, antes de aplicar esta medida, si realmente están preparadas las áreas de servicio de estas vías de pago para dar el servicio publico que nos merecemos los profesionales del transporte.

Algo en lo que seguramente no han pensado, o tal vez si, y en realidad estén convencidos de que se bastara con el estado actual de las existentes. Nuevo error, por otra parte, de un gobierno que nos tiene acostumbrados a aplicar parches a la carrera, sin tener en cuenta las posibles consecuencias, con lo cual se generan nuevas conflictos y que los españoles nos las apañemos como podamos. A ellos que viajan en vehículos oficiales, se desplazan en aviones a todo lujo y, por supuesto nunca se subirán a un camión, estos problemas les tienen sin cuidado.

Todos vemos cuando circulamos por las autopistas el estado de las áreas de servicio. Con aparcamientos muy limitados en plazas para los camiones. Creadas en su día teniendo en cuenta el escaso trafico de los mismos por las vías de pago. Pero que ahora, de llevarse a cabo la locura que pretende Fomento, se convertirán en un autentico caos al no contar con aparcamientos suficientes para el trafico pesado que se generara. Del mismo modo que no cuentan con la capacidad suficiente de prestar el resto de servicios que requerimos los transportistas para sentirnos atendidos adecuadamente.

Restaurantes en manos de multinacionales que sirven comidas de baja calidad y altos precios, incapaces en personal y capacidad para prestar la atención merecida. Escasas o nulas mediadas de seguridad acordes con el coste económico que supondrá para nosotros la utilización de estas vías, algo que debería estar acorde con el mismo. Principalmente porque se da por supuesto que si pagamos por un servicio determinado tenemos, por tanto, el derecho a sentirnos seguros al hacer uso de el.

Evidentemente esta alocada idea del Ministerio de Fomento salta a la luz publica sin regular legalmente, ya que no se puede obligar a nadie a pagar por utilizar una vía sin darle alternativas gratuitas. Pero ese sera tema mas que sobrado para otro articulo. ¡¡¡BUENA RUTA!!

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