Era alrededor de las 22 horas del pasado jueves cuando me sentaba a cenar. Conecte con el movil en Facebook y veo en uno de los grupos dedicados a nuestra profesion la noticia: «Accidente de trafico en Malaga en el que esta implicado un camion, en el mismo fallece el hijo del compañero Jose Parra, un niño de corta edad». Mas o menos esta era la dramatica nota. Mi reaccion, como imagino la de todos los compañeros, fue de dolor inmediato, de solidaridad, es mas, me consta de mucha gente que no pudo contener las lagrimas. Lagrimas que entiendo, porque yo tambien soy padre, tambien he llevado a mis hijas en la cabina del camion cuando eran pequeñas. Se de lo que hablo.
Recuerdo a mi hija Isabel cuando con 5 años su mayor ilusion era acompañarme en vacaciones. Recuerdo como tenia que decirselo el mismo dia, si le daba la noticia el anterior aquella noche no dormia, la dedicaba a preparar a su mochila, incluia un cojin, me despertaba dos horas antes de la hora prevista para salir, ansiosa e ilusionada por acompañar a su padre al que tan solo veia los fines de semana. Se que ella hoy con 25 años su profesion frustrada es ser camionera. Veo con orgullo como cuando mi exmujer se enfada con ella y le dice que se parece a su padre ella sonrie orgullosa.
Todos los que somos padres, y los que no, TODOS aquellos que sentimos en las venas esta profesion, que sabemos y sentimos su dureza y su soledad del dia a dia en la carretera, sin distincion de sexo ni edad, nos pusimos en la piel de ese padre. Rapidamente salto esa SOLIDARIDAD QUE NOS HONRA. Ese sentimiento, nos pusimos en la piel de ese padre, las parejas de l@s compañer@s no pudieron contener el dolor. ¿Que voy a escribir aqui que vosotros no sepais y hayais sentido?. Pero entonces… vino lo mas grave.
De pronto alguien se hizo eco de que el padre estaba detenido, que hacian falta 3.000 euros para pagarle una especie de multa-fianza y llego a aparecer, incluso, un numero de cuenta. Muchos estuvimos dispuestos a hacer nuestra modesta aportacion para hacer frente a esa injusticia. ¡¡No podia ser!!!. Encima de perder a su hijo, detenido. Pero afortunadamente, como ya todo el mundo en mayor o menor medida ya esta curado de espantos, comenzo a investigar, pero el bulo ESTAFA habia calado profundamente y seguia circulando por la red social. Porque somos de naturaleza buenas personas y ante todo solidarios. continuaban en mayor o menor medida los rumores.
Hasta que a la noche siguiente, a eso de las 23 horas yo recibi un mensaje privado de alguien bien informado: «Julio, cuidado, hay muchas sospechas de que todo esto es falso y suena a ESTAFA». No me lo podia creer, ¿Como era posible tanta bajeza humana?. ¿Como alguien podia jugar asi con los sentimientos de la gente solo para sacar provecho economico?. Esto me indigno y me cabreo inmediatamente. ¡¡Esto no se podia consentir!!. ¡¡No podia quedar asi!!. Sobre todo para que no se volviera a repetir en la medida de lo posible. Habian jugado con nuestra solidaridad y nuestros sentimientos. Incluso muchos, como yo, comentamos la notica con familiares y amigos haciendoles participes de nuestro dolor, con lo que le dimos mas publicidad tragica a este incalificable acto de cobardia y desfachatez de algun mal nacido.
Asi que he tomado una decision. Mañana mismo pondre este terrible acto en conocimiento de algun juez, de la guardia civil o la policia en una denuncia. Sobre todo porque me siento ENGAÑADO Y ESTAFADO. Han jugado con mi orgullo de camionero y mi solidaridad de padre y con la de todos mis compañeros de la carretera. No puedo consentir esta humillacion y seguire adelante con todas las consecuencias. ¡¡¡BUENA RUTA!!!.