IMPRESIONES:

      Por fin se ha decidido y Mariano Rajoy comparecera la proxima semana en el Congreso, es cierto que llega tarde a dar explicacciones y que ahora trata de dar su version sobre esta decision diciendo qur es iniciativa suya, que es alli donde debe dar su version de los hechos y bla, bla, bla. Dando la sensacion de ingnorar que era un clamor popular la exigencia de su presencia en la Camara, que no se ha sentido presionado por el anuncio de la oposicion de presentar una mocion de censura que le obligaria a ir al Parlamento, que era una flacia toda la presion internacional para conocer su version sobre el escandalo levantado por Luis Barcenas. En fin que, una vez mas, se atribuye a si mismo ser el paladin de la democracia y nadie como el para defenderla. La verdad es que si no fuera por lo tragico del asunto daria risa.

   El Partido Popular nunca ha sabido gestionar sus crisis, solo hace falta un poco de memoria. Gestiono muy mal la crisis del Prestige y aquellas palabras de Mariano Rajoy diciendo que:»Solo son unos hillillos de plastilina» y que luego se convirtieron en el mayor desastre ecologico de la historia. Que pusieron en pie de guerra a todo el pais, con miles de voluntarios limpiando el chapapote de las costas, dejando en muy mal lugar a un gobierno que no supo afrontar el problema de frente; fue la primera muestra de su falta de coordinacion ante una crisis.

   La segunda mala o malisima gestion fue en los lamentables atentados del 11M, a la puerta de unas elecciones generales, mintiendo descaradamente culpando sin pruebas a ETA de los atentados, negando con diferentes versiones los hechos y despues, cuando perdieron la contienda electoral, culpando veladamente al PSOE de estar detras de aquella masacre, sembrado aun hoy dudas, a pesar de haber sido juzgado en la Audiencia Nacional el caso, sobre la autoria definitiva. Pero eso si, sin reconocer nunca los errores propios.

   Ahora con el escandalo Barcenas esta demostrando una vez mas que no ha aprendido nada del pasado y vuelven sobre sus pasos a gestionar pesimamente mal una crisis. Dando practicamente cada dia una version diferente desde que estallo hace casi cuatro años. Primero defendiendo la honorabilidad del extesorero, despues intentando un arreglo con el para taparle la boca ofreciendole sueldo, despacho, secretaria y chofer, luego que si el despido en diferido, mas tarde pagandole la defensa, lo de los mensajes, a continuacion pasando a definirle como un delicuente aliado con el PSOE, esperando cada dia a ver que declaraba ante el juez para dar otra nueva version. Y ahora estamos en un punto de expectativa a ver que pasa. Mucho me temo que la comparecencia del presidente del gobierno sera para tocar muy de pasada el tema en lugar de contar toda la verdad sobre este escandalo y aprovechar la ocasion para colgarse medallas sobre una recuperacion economica que solo ve el. Tiempo al tiempo.

 

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