Señor Mariano Rajoy Brey: Espero que al recibo de la presente se encuentre usted bien de salud, yo por mi parte estoy un poco cansado despues de una semana un poco ajetreada. Como hace dias que no me dirijo a usted, espero que tenga a bien leer mi carta.

    Tengo que confesarle que llevo unos dias tremendamente preocupado despues de conocer sus ingresos. Esto me ha quitado horas y horas de sueño, incluso estaba tan concentrado en pesar en ello que tenia que hacer esfuerzos para poder centarme en la conduccion. Estoy tentado a realizar una colecta masiva a traves de las redes sociales porque tengo la sensacion de que desde que usted preside el gobierno debe pasar autenticas penurias para llegar a fin de mes. Sobre todo teniendo en cuenta que antes como lider de la oposicion ganaba mucho mas y si comparamos con su etapa de registrador de la propiedad para que contar.

    Me lo imagino a usted preocupado e impaciente porque Zapatero convocara elecciones generales sabedor de que si ganaba perderia dinero. ¡Con lo bien que vivia antes!. Tenia que ser todo un espectaculo verle a su señoria todos los sabados por la mañana empujando el carro de la compra por el Carrefeteur mientras su esposa no paraba de echar y echar productos en el mismo y mientras recorrian los pasillo buscando las mejores ofertas usted borrando con el Bic las anotaciones de la lista de la compra. Que por mucho que uno lo intente una y otra vez siempre terminamos comprando cosas que no teniamos previstas o que no necesitamos. Luego al llegar a la caja uno se da verdadera cuenta de lo que entra en el maldito carro, parece que nunca se acaba. Eso si, a la hora de pagar como buen caballero usted sacaba el sobre del bolsillo de la chaqueta y pagaba en efectivo. «Que no se puede uno fiar cariño de las tarjetas, en estos sitios te la copian por menos de nada y el numero es secreto y no se le cuenta a nadie».

   Y ahora peor todavia, viviendo en un palacio, con lo grande que es y lo que gastara esa casita de nada en calefaccion. Encima para colmo de males casi siempre hay invitados y con menos sueldo encima, ¡Vaya faena!. Me lo imagino sacando un rato libre por la mañana de un dia laborable para ir al banco a pedir un credito porque si todavia tiene que estar tres años mas y con esos ingreos tan escasos es posible que se arruine. ¡Lo que hay que hacer por el bien de los españoles!, ¡Cuanto sacrificio requiere el noble arte de la politca!.

    En fin señor Rajoy, pienselo bien, si la cosa se pone muy jodida le cambio su sueldo por el mio que es cuatro veces menor. Atentamente. Un camionero.

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