Si, como suena, así de duro, así de cruel es la realidad, que nadie se rasgue las vestiduras: «Los políticos leoneses no quieren a la juventud en los pueblos». No me duelen prendas al escribirlo, es más, soy repetitivo otra vez, para no variar, y lo hago con pleno conocimiento de causa.
No quieren a la juventud en los pueblos, sencillamente por muchos motivos:
No hacen nada, absolutamente nada, por modernizar las comunicaciones, sobre todo de Internet, para ellos lo único a lo que se puede dedicar la gente de los pueblos es a la agricultura y la ganadería. ¡Dios les libre de tomar la iniciativa de hacer algo on-line, de emprender con las nuevas tecnologías!, que ya no son tan nuevas; eso que ni se le ocurra, porque se van a encontrar con tarifas y precios similares a los que pagan los madrileños, por ejemplo, en plena Gran Via, pero con la cobertura y los servicios del país más retrasado del mundo.
Ante esto, lo políticos leoneses, lo único que harán es hablarte con terminología palabrería demagógica, diciendo y mintiendo conscientemente, mientras piensan lo contrario y te miran como a un ser de otro planeta. ¿Internet? ¡Por favor!, ¿Qué estás pidiendo?, ¿Serás osado?, ¡Eso nunca jamás!. Para ellos Internet es el demonio, el diablo y el enemigo que te puede dar conocimiento, progreso, ideas revolucionarias, proyectos diabólicos alejados de criar ganado o trabajar las tierras…. ¿Será atrevido el joven este?, ¿Qué se habrá pensado que León en la sede de Google?, ¡Que se vaya a León que allí tiene el Incibe, o como mucho en Armunia que allí hay fibra óptica, pero en un pueblo jamás!
En los pueblos que se conformen con poder hablar por telefono los dias que haya cobertura, la señal como mucho 3G, el 4G para unos pocos privilegiados, con el 2G les sobra, si hay averías que se busquen la vida, con la fibra óptica en los pueblos ¡Ni soñando!, eso no trae más que problemas y perdición. La información, el progreso tecnológico, lo de emprender en otras cosas que no sean animales o campo, eso es cosa de comunistas revolucionarios. ¡Ni hablar!. El joven que no esté contento ¡Que se vaya, y si es lejos de la provincia mejor, aquí no queremos revolucionarios, con los ancianos nos sobra, que no dan problemas y además son los votantes más fieles!.
Sí que nadie se alarme, esto anterior es la pura y dura realidad de cómo piensan los políticos leoneses. Eso sí, son los primeros en sacar a relucir sus complejos de inferioridad y sumisión ante la Junta en Valladolid y el Gobierno en Madrid, mientras la población de la provincia sigue mermando, envejeciéndose y resignándose a lo que hay. Triste y dura realidad, pero tal y como suena.
Asi, que el único desahogo que queda es este, escribir sobre la realidad, aparte de ello, solo hay una solución si no quereis resignaros, terminar emigrando fuera de la provincia, volver solo en vacaciones y decir, bien alto y con orgullo, que a pesar de los políticos leoneses, te sientes mucho más leonés que ellos.
Foto: Archivo