El ministro de educacion Wert ha conseguido sacar adelante su proyecto de ley de la reforma educativa dando el primer paso con su aprobacion por el consejo de  ministros, ahora iniciara su tramite parlamentario y todo hace suponer que saldra adelante tanto en el Congreso como en el Senado gracias a la mayoria en ambas camaras del Partido Popular. Su aprobacion supone un nuevo triunfo de la Iglesia en su influencia directa sobre este gobierno.

    El proyecto nace con la clara oposicion de todo el sector educativo, padres, alumnos, profesores y tambien de algunas autonomias como la catalana que ya han anunciado que recurriran ante el Tribunal Constitucional la nueva ley. Pero esto parece importarle poco a este gobierno acostumbrado como esta ya a legislar en contra de todos los sectores, asi que una nueva oposicion le tiene sin cuidado. A ellos lo unico que les preocupa es imponer su ideologia aunque sea en contra de los ciudadanos, para eso gozan de una mayoria absoluta que les da total libertad para hacer lo que les de la gana.

    Resulta curioso que este proyecto de ley le de tanta importancia a la asignatura de religion como a la de matematicas equiparandola al mismo nivel y contando con la misma puntuacion para la evaluacion final en el bachillerato. Dejando de lado totalmente a la asignatura de educacion para la ciudadania que tenia como base principal educar a los jovenes en los valores democraticos.

    La imposicion si o si de la religion resulta discriminatoria con aquellos estudiantes que no quieran recibir una educacion catolica dejandoles en inferioridad de condiciones con los que si elijan la religion como asignatura, teniendo que ser evaluados en una clara inferioridad de condiciones. Por otro lado esta ley ademas de ser una concesion a la Iglesia tambien lo es al sector mas conservador de la misma como el Opus Dei al financiar con dinero publico los colegios de esta orden a pesar de que discriminen a los alumnos en sus aulas separandoles por sexos. Al mismo tiempo pagara la educacion en colegios privados a los alumnos que en Cataluña quieran recibir una educacion en castellano, en lugar de hacerlo en colegios publicos del estado.

    Asisitimos una vez mas a un triunfo claro del sector mas conservador del gobierno empeñado en adoctrinar a los ciudadanos con la misma intencion que se hacia en la dictadura, imponiendo sus leyes sin tener para nada en cuenta a los ciudadanos. Me temo que esta no sera la unica imposicion de la ultraderecha, le seguiran otras como la ley del aborto y muchas mas.

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