Las palabras que pronuncio Maria Dolores de Cospedal la vispera del dia internacional de la mujer trabajadora ante miembros de su partido politico son una mas de las meteduras de pata a las que nos tiene acostumbrados ultimamente la secretaria general del Partido Popular. Vino a decir mas o menos: «Que en la actualidad la mujer trabajadora ademas de desarrolar su actividad laboral luego tenia que enfrentarse a diario a sus tareas como madre y ama de casa ya que los maridos cuando llegaban a la misma se dedicaban a estar tumbados en el sofa bebiendo cerveza y viendo el futbol».

    Una muestra mas de que la señora Cospedal esta mejor callada y sin abrir la boca, porque cada vez que lo hace, como suele decirse «sube el pan». Por supuesto deja en muy mal lugar a su marido que por sus palabras se deduce que es un machista y que ni siquiera la ayuda a recoger la mesa. Por otro lado da a entender que su partido se ha quedado anclado -como sospechamos muchos-, en los años cincuenta en plena efervescencia del franquismo donde aquella Seccion Femenina que dirigia Pilar Primo de Rivera recorria el pais aleccionando a las mujeres en su forma de actuar, diciendolas que tenian que ser siempre sumisas ante sus maridos y hacerles sentir siempre el rey de la casa.

   Por supuesto que de sus palabras tambien se deduce la forma de actuar de las mujeres de la derecha segun el punto de vista de esta señora. Ahora entiendo que la ministra de sanidad Ana Mato no se entrerara de los negocios turbios de su marido, ocupada como estaba en cargarse la sanidad española en el ministerio y luego cuando llegaba a casa encima tenia que hacer la comida, lavar la ropa, limpiar, organizar el cumpleaños de su hijo procurando que hubiera muchos globos y confetti del mas caro y todo lo demas. Asi que como se podia dar cuenta la pobre si su marido se presentaba de pronto con un jaguar en la puerta.

    Afortunadamente son muchas las mujeres de ideologia conservadora que aparte de luchar cada dia por ganarse un merecido sitio en el mercado laboral, luego cuando llegan a sus casas encuentran la colaboracion de sus maridos con las tareas domesticas y con la educacion de los hijos.

    Asi que señora Cospedal hagame caso y quedese calladita al menos en unos veinte años cuando ya nadie se acuerde de que usted una vez era la secretaria de PP y que cada vez que hablaba metia la pata hasta el fondo.

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